Va un dato terrible que comparte el Hospital Veterinario de Especialidades en Fauna Silvestre y Etología Clínica de la UNAM: “los problemas de conducta deterioran la relación humano-animal y son la causa número uno de abandono o eutanasia en animales de compañía”.
Lo que pocas personas saben es que muchos animales calificados como “mal portados” en realidad tienen trastornos emocionales que pueden ser tratados médicamente para adaptarse a la vida social con su dueño.
La etología clínica es la disciplina que se encarga de la prevención, diagnóstico y tratamiento de los problemas de comportamiento en perros y gatos, por lo que un etólogo canino es la persona indicada para ayudar a cualquier persona que tenga problemas severos con su perro.
Un adiestrador de perros es un experto que diagnostica y da tratamiento a problemas de comportamiento como agresión, miedo o ansiedad, los cuales pueden ser indicadores de alguna patología.
Por ejemplo, la agresión en los perros puede tener una causa orgánica, como dolor, hipotiroidismo, hidrocefalia, tumores intracraneales, algunas encefalopatías o disminución en la serotonina cerebral.
De acuerdo con la American Kennel Club (AKC), el etólogo canino identificará la causa del comportamiento problemático del perro y luego creará un plan de tratamiento personalizado.
A veces, un etólogo canino también es médico veterinario, pero no siempre. Cuando no es así, el etólogo y el veterinario trabajan en conjunto para tomar decisiones y hacerle estudios al perro para revisar de dónde pueden venir sus problemas de comportamiento como agresión o ansiedad extrema.
Es importante saber que cualquier problema de salud subyacente que cause dolor también puede provocar cambios en el comportamiento y la personalidad de un animalito.
Hay que poner mucha atención a dos comportamientos específicos: agresividad y ansiedad.
Si ya llevaste a tu perro a cursos de adiestramiento canino, te leíste los libros de César Millán y aún tiene problemas severos de comportamiento, lo primero que debes hacer es discutirlo con su médico veterinario.
La AKC dice que si el médico veterinario descarta alguna afección médica subyacente entonces es momento de buscar a un etólogo canino.
Queremos compartirte que en Inteligencia Canina no recibimos perros con problemas de agresión o ansiedad severa porque no queremos poner en riesgo a los peludos que asisten a adiestramiento, guardería o pensión.
Sin embargo, cuando es un problema de ansiedad ligera, como la ansiedad por separación del dueño, sí podemos recibirlos.
En la escuela podemos observarlos y determinar si venir les es favorable.
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