Cómo Entrenar a tu Perro con Clicker

4 de diciembre de 2020

Introducción


El entrenamiento con clicker es una forma popular de entrenar a tu perro y recompensar su buen comportamiento. Puede ser divertido para usted y su perro y, a menudo, produce resultados rápidos y efectivos.


El entrenamiento con clicker se basa en el concepto científico de que un animal seguirá teniendo un comportamiento que se recompensa.Una vez que tu perro comprenda de qué se trata el clicker, podrás enseñarle todo tipo de trucos con muchas recompensas a lo largo del camino.

Cómo entrenar a tu perro con clicker

Preparándose para entrenar a su perro con clicker


Un clicker, que está disponible en su tienda de mascotas local, es un pequeño dispositivo de plástico de mano con un botón o una pequeña lengüeta de metal que presiona para hacer un clic. La clave para usar un clicker es usarlo en el momento exacto en que su perro realiza el comportamiento esperado. El sonido de un clic siempre debe ir seguido de algún tipo de recompensa (por ejemplo, comida, juguetes, elogios verbales).


Antes de que pueda usar el clicker con fines de entrenamiento, deberá enseñarle a su perro lo que el clicker significa para él. Esto se conoce como "cargar" el clicker. Mientras esté en la habitación con su perro (cualquier habitación tranquila servirá), sostenga una golosina en una mano y el clicker en la otra. Presione el clicker una vez. Cuando su perro se vuelva hacia usted al oír el clic, dele la golosina inmediatamente.


Algunos perros pueden ser sensibles al sonido del clicker. Si su perro se escapa cuando escucha el clicker, probablemente el sonido sea demasiado fuerte para él. Para suavizar el sonido, puede envolver el clicker con una toalla. También puede utilizar un dispositivo de clic diferente, como un bolígrafo, que tenga un sonido de clic más suave.

Entrenando a su perro con un clicker


Una vez que su perro haya aprendido qué esperar con el sonido del clicker, puede usarlo para entrenarlo para que haga diferentes órdenes (por ejemplo, sentarse, sentarse, quedarse quieto). Sería mejor entrenarlo en un lugar tranquilo sin otras personas o distracciones alrededor. Si tienes un patio trasero cercado, también puedes entrenarlo afuera.


Un método para entrenar a tu perro con clicker se llama "atrapar": harás clic tan pronto como descubras a tu perro haciendo un buen comportamiento que ya es bastante bueno haciendo por sí solo. Por ejemplo, si él está en la habitación con usted y decide acostarse para sentirse más cómodo, haga clic en cuanto se acueste e inmediatamente tírele una golosina. Cuando se levante para comer la golosina, espere hasta que se recueste de nuevo y repita el proceso.


A esto se le llama "modelar": al usar el clicker y la recompensa inmediata en cada pequeño paso, está modelando el nuevo comportamiento como un todo. Por ejemplo, si quieres entrenar a tu perro para que se acueste en un área específica, haz clic y recompénsalo tan pronto como gire su cuerpo en la dirección de esa área. Luego puede hacer clic y recompensarlo en cada pequeño paso: comenzar a caminar hacia el nuevo lugar, llegar al nuevo lugar, comenzar a acostarse y recostarse completamente en el suelo.

Adiestrar a tu perro con clicker en 5 minutos [Vídeo]


Un señuelo de comida se usa comúnmente cuando se entrena a un perro para que se acueste. Para este comportamiento, debe sostener la golosina justo frente a la nariz de su perro y moverla lentamente hacia el suelo. Su perro seguirá la golosina hacia abajo. Cuando sus codos toquen el suelo, haga clic inmediatamente y recompénselo con la golosina.


Agregar una señal verbal es útil independientemente del método de entrenamiento con clicker que hayas estado usando para entrenar a tu perro. Primero dirá la señal y luego esperará a que su perro haga el comportamiento deseado. Tan pronto como lo haga, haga clic y recompénselo con un premio.

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Llevar a tu perro a la playa es un plan perfecto: corre, juega, se divierte con las olas y vive una aventura que seguramente recordará con pura felicidad. Pero, ojo, la diversión no termina cuando guardas la sombrilla y subes al coche. El verdadero reto empieza después, porque la sal, la arena y el sol pueden dejar estragos en su pelaje, en su piel y hasta en sus patitas. Perrito playero es perrito bañado Lo primero que debes tener en mente es el baño. El agua de mar se adhiere al pelo y lo reseca, mientras que la arena se mete en cada rincón: entre las patas, en las orejas y hasta en el hocico. Si no se retira adecuadamente, puede causar comezón, irritaciones o hasta infecciones. Por eso, lo más recomendable es llevarlo a un servicio de estética canina donde le den un buen baño profesional con productos especiales para perros. Ahí saben qué tipo de shampoo aplicar, cómo enjuagar a fondo y cómo hidratar la piel para que no sufra resequedad después de la exposición al sol y al agua salada. Otro punto clave son las orejas y los ojos. Los perros suelen zambullirse con toda la emoción del mundo, pero esa misma emoción puede dejarles humedad en el oído o sal que irrite sus ojos. En una estética canina pueden hacer una limpieza cuidadosa con productos seguros, evitando riesgos que muchas veces pasamos por alto en casa. Además, suelen revisar las almohadillas de las patas, que después de la arena caliente pueden quedar agrietadas o resecas. Un poco de bálsamo hidratante aplicado por profesionales hace maravillas y evita molestias. Ahora los cuidados en casa El cepillado también es fundamental. Los nudos en el pelo son comunes después de un día de playa, sobre todo en perros de pelo medio o largo. En la estética utilizan los cepillos adecuados y técnicas para deshacer enredos sin lastimar. Incluso, si es necesario, pueden dar un recorte ligero que no solo mejora el aspecto de tu perro, sino que también facilita mantenerlo limpio y fresco en los días siguientes. Además de todo esto, la mayoría de las estéticas incluyen otros servicios como corte de uñas, limpieza de oídos más profunda y hasta revisiones básicas que ayudan a detectar irritaciones en la piel o señales de molestias. Ese “extra” es invaluable, porque garantiza que tu perro no solo quede limpio, sino que también se mantenga sano después de la aventura. Al final, piensa en esto: llevar a tu perro a la playa es un regalo para él, pero los cuidados posteriores son el verdadero acto de amor. No se trata solo de quitarle la arena, sino de asegurarte de que su cuerpo se recupere del sol, del agua salada y del calor. Con la ayuda de una estética canina tendrás la tranquilidad de que cada detalle es atendido por manos expertas, y además tu perro saldrá oliendo delicioso, con el pelo brillante y feliz de la vida. Para la próxima vacación canina Así que la próxima vez que planifiques un paseo playero con tu lomito, incluye en tu itinerario una parada en la estética. Créeme: no hay nada como verlo correr en la arena un día y, al siguiente, verlo descansar limpio, fresco y con la cola moviéndose de pura satisfacción. Porque sí, la playa es para disfrutar, pero la estética es para que esa alegría dure mucho más tiempo.